A los técnicos se les suelen encomendar las siguientes tareas:

• Proporcionar documentación, instrucciones detalladas, planos o especificaciones para explicar cómo se deben fabricar, construir, ensamblar, modificar, mantener o utilizar dispositivos, piezas, equipos o estructuras.
• Utilizar computadoras y sistemas informáticos (incluyendo hardware y software) para programar, escribir software, configurar funciones, introducir datos o procesar información.
• Realizar el mantenimiento, la reparación, la calibración, la regulación, el ajuste fino o la prueba de máquinas, dispositivos y equipos que funcionan principalmente con principios eléctricos o electrónicos (no mecánicos).

Los grandes artesanos suelen ser capaces de:

• Usar las manos y los brazos para manipular, instalar, posicionar y mover materiales.
• Manipular objetos pequeños con precisión y destreza.
• Ser activos y proactivos en actividades físicas que requieren un uso considerable de brazos y piernas, así como mover todo el cuerpo, como trepar, levantar, mantener el equilibrio, caminar, agacharse y manipular materiales.

• Instalación y prueba de termostatos automáticos, programables o inalámbricos en edificios residenciales o comerciales para minimizar el uso de energía para calefacción o refrigeración.
• Instalación de deshumidificadores o equipos relacionados para espacios que requieren aire fresco y seco para operar de manera eficiente, como salas de computadoras.
• Instalación de enfriadores centrífugos magnéticos, compresores o equipos relacionados para enfriar las temperaturas del aire mediante el uso de agua recirculada.
• Instalación o reparación de sistemas de purificación de aire, como filtros especializados o sistemas de purificación de luz ultravioleta (UV).
• Instalación o reparación de bombas de calor geotérmicas autónomas o bombas de calor geotérmicas o aerotérmicas híbridas para minimizar el consumo de energía basado en carbono y reducir las emisiones de carbono.
• Instalación de controles de radiador para controlar la calefacción de edificios residenciales o comerciales.
• Reparación o servicio de sistemas de calefacción, ventilación y aire acondicionado (HVAC) para mejorar la eficiencia, como cambiar filtros, limpiar conductos o rellenar refrigerantes no tóxicos.